Con el torbellino que es Diciembre para todos, llegaron los 12 meses del bellezo. Si!! Ya un año! Y lo vivo como si fuera ayer que rompí bolsa una mañana de llovizna y que luego de un par de horitas lo veía nacer con sus ojitos cerrados y con sus ganas de abrazar el mundo.
Pasaron 12 meses y un montón de días en los que lo vimos
crecer, llorar, jugar, sentarse solito, dejar de mamar para agarrar la mamadera,
decir chau con la manito, protestar, señalar lo que quiere, ponerse la mano en
la oreja y decir hola (en su idioma), gatear, arrodillarse, intentar pararse,
pegarle a la pelota y patear todo lo que se cruza adelante, reírse a
carcajadas, tirar besos, sacarle los juguetes a la hermana y desarmar sus
torres de bloques, hacer mil sonrisas, asombrarse con los sonidos de los
instrumentos, bailar, comer todo lo que se le ofrezca, sonreír, sonreír y
sonreír!
Este 8 lo pasamos lindo, a las corridas. Armamos el árbol y
la belleza mezclo todo (hubo que explicarle que justo se arma el árbol el día
del cumple de su hermano, pero no porque es el cumple del hermano
precisamente). Creo que para el próximo año, lo armamos antes o después!!
Y el bellezo lo paso bien, babeando los adornos del árbol y
peleando con la hermana por las pelotitas y los cascabeles que colgamos. Las
luces les fascinaron a los dos!!
Después llegaron esos tíos que nunca fallan para saludar al príncipe
en su día!!
Nos espera el pequeño festejo que estamos preparando para el
sábado con Bautismo incluido!
Buen resto de semana y respiren profundo que se vienen aires
de cambio!!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario